El gigante de Mountain View presentó en su conferencia para programadores Google Hangouts, su servicio de mensajería instantánea que tratará de rivalizar con los consagrados WhatsApp y Line.
Este objetivo no se presenta una tarea fácil, pues la aplicación de Google aterriza con una considerable desventaja, principalmente temporal. Además, tendrán que convencer a un público cada vez más reticente a los cambios de que ésta puede ser la app definitiva, y no una opción más.
Para ello cuentan con varios argumentos de peso, como es la compatibilidad multiplataforma (Android, iOS e incluso ordenador mediante extensión de Chrome) y la sincronización de todos los mensajes, de modo que las conversaciones pueden ser consultadas desde diferentes dispositivos.
A este punto fuerte hay que añadir la posibilidad de realizar videollamadas en grupo de forma sencilla, aunque las conexiones móviles actuales no permitan aprovechar al máximo esta funcionalidad debido a sus limitaciones. Y cómo no, la total gratuidad del servicio.
Con una clara vocación social, Google Hangouts está perfectamente integrado con G+, y supone la unificación de Gmail Chat, GTalk y Google+ Messenger en una herramienta única.
Sin embargo, este aspecto está recibiendo las críticas de sus usuarios, que ven cómo las imágenes enviadas a través de un “hangout” son guardadas automáticamente en el perfil de Google Plus.
Si en algo coinciden todos los análisis es que la app está aún “muy verde”, pues no integra llamadas de voz ni el envío de SMS, tampoco Google Voice (hasta ahora disponible en EEUU).
Los que ya hayáis probado la aplicación posiblemente habréis experimentado una cierta sensación de “decepción”, pero hay que recordar que Hangouts aún está en fase de desarrollo, por lo que deberemos seguir de cerca sus actualizaciones, que esperamos nos sorprendan.