Galaxy S5 Neo, la actualización del móvil estrella en 2014

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Galaxy S5 Neo

Es posible que muchos lectores aun no conozcan el Galaxy S5 Neo ni cuál fue el objetivo de la firma surcoreana con su lanzamiento y por ello en esta introducción daremos una breve pincelada. Este dispositivo, que fue lanzado en el mes de octubre de 2015, tenía la clara intención de actualizar el Samsung Galaxy S5 que tanto éxito recolectó para la firma. Así pues, se actualizaron un poco las prestaciones y el resultado fue un terminal bastante atractivo aunque con algunos contras, todo hay que decirlo.

Principales características del Galaxy S5 Neo

El Galaxy S5 Neo integraba una pantalla de 5.1 pulgadas con resolución Full HD (1920 x 1080 píxeles), es decir, la misma que la del Samsung Galaxy S5. La tecnología usada es Super AMOLED igualmente. Las dimensiones o el diseño tampoco cambian de un terminal a otro aunque sí lo hace el peso que en el Neo ha adelgazado hasta los 142 gramos, una diferencia poco notable, pero una diferencia a fin de cuentas.

El Galaxy S5 incluía una característica muy positiva que no vemos en la ficha técnica del Galaxy S5 Neo y es protección Gorilla Glass 3 aunque sí mantiene la certificación IP67 que lo hace resistente al polvo y al agua. En el campo de la potencia nos encontramos con un procesador Exynos de ocho núcleos con capacidad para trabajar a 1.6 GHz de velocidad de reloj, algo que sí que cambia respecto al S5 pues en éste se integra un Qualcomm Snapdragon 801 de cuatro núcleos.

El Samsung Galaxy S5 Neo no tiene versiones

Sí podíamos ver dos versiones diferentes en el Galaxy S5 pero en el Neo solo hay una disponible que es de 16 GB aunque es ampliable hasta los 128 GB mediante tarjeta MicroSD. La memoria RAM se mantiene igual en ambos dispositivos siendo de 2 GB. El sistema operativo en el Galaxy S5 Neo es la versión 5.1.1 Lollipop si bien en su antecesor fue la 4.4.2 Kit Kat que luego se actualizó a la versión 5.0.

Las cámaras en ambos terminales siguen siendo las mismas: 16 megapíxeles para la trasera y 5 para la delantera. Estamos hablando de una cámara (la trasera) que se posiciona muy bien en el mercado gracias a sus potentes funciones y a su software de manejo. Por último nos encontramos con un apartado de conectividad idéntico y muy completo (4G, WiFi Direct, Bluetooth 4.1, NFC o MHL, entre otros) y una batería de 2800 mAh que sigue siendo igual a la del S5.

¿Qué diferencias hay entonces entre un dispositivo y otro?

El Galaxy S5 Neo tiene un procesador más potente, lleva la versión 5.1 Lollipop de base y solo incluye una versión de 16 GB. Por lo demás, ambos dispositivos son prácticamente iguales. Lo más curioso de este dispositivo es que, pese a tener un procesador superior, algunos análisis determinan que es más lento que el S5. Por otra parte, los materiales de construcción son muy básicos y poco resistentes, no hay sensor de huellas dactilares y parece que en la cámara se echa en falta alguna función o rendimiento que sí tenía el S5, aunque esto según lo que apuntan algunos análisis.

Con esta información que tienes ahora, ¿crees que ha merecido la pena esta actualización por parte de la firma?

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